Eduard Billy Meier es un granjero suizo. Un día, allá por los años 70, recibió una
llamada, algo así como un mensaje telepático. Entonces cogió su motocicleta y
se dirigió hacia algún lugar en el bosque. Billy Meier no se imaginaba que su
vida, el enfoque transcendental, iba a cambiar significativamente.
Llegado a un claro del bosque, una nave procedente de Las Pleyades descendió y de ella surgió Semjase. Tal vez, muchos de vosotros ya conocéis esta historia, que para mi es una de las mas reveladoras en el mundo de la ufologia. No solamente por los visitantes extraterrestres procedentes de Las Pleyades y sus deseos de darse a conocer a los seres humanos, sino por las personas quienes al parecer eligen para comunicar sus mensajes, buscando los seres del cosmos cualidades humanas que se nos escapan a primera vista. Cuando le preguntaron a Billy Meier como describiría a Semjase, este respondió: "Como un ser humano verdadero"
El segundo personaje se llama Asket y pertenecía al Universo Dal. Este Universo, -decía Asket-, es desconocido para vosotros. Se trata de un Universo paralelo al vuestro. Pero los parámetros de espacio y tiempo son distintos. Existen, decía, universos paralelos que no son perceptibles pero existen.
Asket indujo a Billy a vivir todas las posibles experimentaciones de la vivencia diaria a fin de prepararle para el futuro contacto en sus años de madurez. Viajó en consecuencia por toda la zona de oriente y por el Himalaya. Aprendiendo las culturas y las doctrinas y formándose en el espíritu de las cosas y en la sabiduría expontánea de la naturaleza.
Este comandante femenino, de 1.70 m. de altura y estilo nórdico, dice venir de la Constelación de Las Pléyades, a unos 500 años luz de la Tierra y de un planeta llamado ERRA que pertenece al sistema de Taygeta. Así mismo dice que su civilización y otras tantas pertenecen a una Confederación compuesta de 127 millones de seres.
Nosotros también estamos muy lejos de la perfección y debemos evolucionar constantemente, -le explicó ella a Meier-. Cuando decidimos entrar en contacto con el humano terrestre, lo realizamos porque sentimos una obligación respecto al desarrollo y a la vida esparcida por todo el Universo. No somos misioneros ni maestros, pero actuamos para mantener el orden en todas las áreas del espacio. De vez en cuando entramos en contacto con habitantes de diferentes mundos y buscamos unas individualidades que creemos que aceptarán nuestra existencia. Entonces impartimos información a esos contactados, pero solo cuando su raza se ha desarrollado y comienza a discurrir. Luego, lentamente, nosotros y otros les preparamos para la verdad, de que no son los únicos seres pensantes del universo.
Los robots y los androides realizaban en Erra la mayor parte de las labores de esfuerzo físico. Los androides tenían el aspecto y se conformaban de una forma tan parecida a los seres humanos, que solo podían distinguirlos por sus ropas. Todos llevaban uniforme, cuyo color indicaba la tarea a la que estaba destinado el androide. Reflejaban tanto la vida real porque su piel estaba confeccionada con protoplasma vivo. Y también su cerebro era un organismo capaz de respuestas naturales y de conversación.
En Erra no solo existían las familias, sino que, a propósito, se las mimaba y cuidaba. Aunque fuesen sexualmente maduros a partir de los trece años, los pleyadianos no se casaban hasta haber completado su educación, un proceso que comenzaba a los cuatro años y que duraba hasta que alcanzaban los setenta. Para entonces habían adquirido ya unos conocimientos específicos en quince o dieciséis disciplinas, aunque, en el caso de Semjase, llegaban hasta treinta. No existía gobierno.
Tienen allí lo que llamaríamos aquí jefes espirituales explicaba Meier a quienes acudían a verle. La forma más elevada de lo que entienden por liderazgo la llaman Horralft. Se trata de una forma de vida que no posee rostro ni cuerpo, y que tampoco es espiritual. Es una mezcla de ambas cosas. Si le pusieras la mano encima, lo atravesarías. El Horralft no imparte órdenes. Te dá algo más, lo que nosotros llamamos sugerencias. Y en ese planeta, cada cual, por medio de su propia sabiduría en evolución, trata de dar lo mejor de si mismo.
‑¿Por qué no aparecéis en masa y os mostráis al público?, y ¿por qué no entrais en contacto con los gobiernos?.
‑ Las masas nos reverenciarían como a Dioses, tal como ocurrió en épocas pasadas, explicó Semjase, o se pondrían histéricas. Por eso consideramos más prudente entrar en contacto solo con personas individuales durante algún tiempo, para difundir, a través de ellas el conocimiento de nuestra existencia y nuestra llegada a este planeta.
Además los Gobiernos de la Tierra están compuestos de seres humanos para quienes el ansia de poder y la sed de lograr beneficios constituyen algo característico. Sólo desean, bajo el pretexto de la paz y de la amistad, ocupar nuestras naves luminosas y ejercer el poder absoluto sobre la Tierra. Pero no se detendrían aquí. Desearían capturar todo el Cosmos, porque no conocen límites de ninguna clase. Por otra parte, si no son capaces de lograr la paz y la amistad entre las naciones de la Tierra, ni si quiera en sus propios países, ¿cómo van retener semejante poder en sus manos, como el de nuestras naves luminosas?. No tenemos el menor interés en revelarnos al público en general. Por lo tanto, en la actualidad resulta aconsejable mantener contacto sólo con seres humanos individualmente. y a través de ellos, y lentamente, permitir que el conocimiento de nuestra existencia y de nuestra misión lleguen a conocerse, y preparar a otros para nuestra llegada.
Una advertencia más: existe una estructura evolutiva en el orden espiritual que el hombre terrestre debe desarrollar por si mismo antes de que resuelva ciertos secretos científicos. Incluso entonces, el peligro existe, en el sentido de que el hombre terrestre, al ejercitar ese conocimiento técnico, lo emplee con malos finés y por motivos y ansias de poder. Debe recordar, cuando logre las técnicas necesarias, que no podrá volar a otros planetas con la esperanza de resultar siempre vencedor.
Los otros habitantes cósmicos no se encuentran impotentes al ataque de otra raza. Podría seguirse una derrota mortífera para la Humanidad Terrestre y una completa esclavitud que le podría llevar otra vez a los tiempos más primitivos. Cuando el hombre terrestre trate de llevar su bárbara ansia de poder al cosmos, debe considerar su propia destrucción.
Para ayudarles en su misión, los pleyadianos habían entrado en contacto telepático con numerosos terrestres, pero los elegidos, llegado el momento, demostraron carecer de conocimientos, voluntad o lealtad. Los pocos que poseían todas estas cualidades temían exponerse, y por eso se mantenían callados a cerca de sus contactos.
- Nosotros somos los pleyadianos -explicaba Meier a la gente sentada a la mesa-, procedemos de un cruce entre pleyadianos y seres humanos de la Tierra.
- Se parece mucho a la Tierra. Es un poco más pequeño que la Tierra. Los edificios son redondos. Los vehículos no tienen ruedas, están suspendidos y el trabajo lo realizan los robots y los androides. Los androides son a medias mecánicos y a medias orgánicos. y capaces de pensar por si mismos, pero los humanos vigilan todo cuanto hacen. Cada familia no cuenta con más de cinco personas, los padres y un máximo de tres hijos.
Meier contó que unas tres mil naves de otros sistemas estelares de la galaxia visitaban la Tierra cada año:
- Si una raza humana cruza una distancia muy grande, tal vez años luz del espacio, no va a venir aquí para plantear problemas o para comenzar una guerra. El ser humano es una criatura combativa, toda su vida se basa en la lucha, por lo que cree que si hay aquí una raza procedente de otro planeta, esas criaturas harán exactamente lo mismo que él. Pero no es cierto. Si lo deseasen los pleyadianos destruirían la Tierra en cuestión de minutos, -explicó Meier-. Y hubieran esclavizado a todos los terrestres hace ya miles de años. Meier admitió que algunas de las naves se habían llevado a humanos contra su voluntad y los antropólogos quienes, al descubrir a un pueblo primitivo que todavía existe en la Tierra, mandan equipos para estudiarlos y luego vuelven con ellos para enviarlos al laboratorio.
Con los pleyadianos a unos quinientos años luz de la Tierra, los físicos terrestres opinan que, viajando a la mayor velocidad concebible, es decir a la velocidad de la luz, un viaje desde Las Pléyades a la Tierra, y regreso, requeriría mil años, sin embargo, Meier mantenía que el sistema de propulsión pleyadiano era capaz de alcanzar velocidades de muchos millones de veces más veloces que la luz. Y que, con frecuencia, Semjase iba y volvía desde su planeta natal ERRA, y la Tierra. Los pleyadianos, añadía Meier, realizaban el viaje en siete horas.
- Para viajar a través del espacio cósmico, -dijo-, se necesita un impulso que sobrepase muchas veces la velocidad e la luz. Pero esa propulsión solo entra en acción cuando ya se ha alcanzado dicha velocidad. Esto significa que una nave luminosa necesita por lo menos dos impulsos: uno normal que proporciona impulso hasta alcanzar la velocidad de la luz, y un segundo híper‑impulso, como vosotros lo llamaríais. Con este segundo impulso paralizamos el tiempo y el espacio. Y sólo cuando el tiempo y el espacio han dejado de existir somos capaces de viajar a distancias de anos luz en una fracción de segundo. Todo se realiza de una manera tan rápida que los vivientes ni se dan cuenta.
No estoy autorizada a darte más detalles. Pero puedo decirte que vuestros círculos científicos más avanzados siguen aún trabajando sobre sistemas conocidos como impulsos emisores de luz e impulsos de taquiones. Los principios elementales ya les son conocidos. El impulso emisor de luz sirve como un sistema de propulsión normal para hacer avanzar las naves hasta los límites del espacio y del tiempo. Una vez allí, el impulso del taquión entra en acción. Se trata del sistema de híper-propulsión, que es capaz de forzar el espacio y el tiempo hasta el híper‑espacio. Nosotros empleamos otros nombres, pero los principios son exactamente los mismos.
Conclusión.‑ Todas las experiencias vividas por este gran contactado, se pueden resumir en tres apartados principales:
Llegado a un claro del bosque, una nave procedente de Las Pleyades descendió y de ella surgió Semjase. Tal vez, muchos de vosotros ya conocéis esta historia, que para mi es una de las mas reveladoras en el mundo de la ufologia. No solamente por los visitantes extraterrestres procedentes de Las Pleyades y sus deseos de darse a conocer a los seres humanos, sino por las personas quienes al parecer eligen para comunicar sus mensajes, buscando los seres del cosmos cualidades humanas que se nos escapan a primera vista. Cuando le preguntaron a Billy Meier como describiría a Semjase, este respondió: "Como un ser humano verdadero"
A continuación transcribiré el capitulo XX de Los grandes contactados, de Manuel Navas Arcos donde se hace una ampliación
detallada de la experiencia de contacto con civilizaciones extraterrestres
vivida por Billy Meier
......................................................................
En el planeta Erra, no existía gobierno. Tienen allí lo que
llamaríamos aquí Jefes Espirituales. La forma más elevada de lo que entienden
por liderazgo la llaman Horralft. Se trata de una forma de vida que no posee
rostro ni cuerpo, y que tampoco es espiritual. Es una mezcla de ambas cosas. Si
le pusieras la mano encima, lo atravesarías. Ezhorralft no imparte órdenes. Te
dá algo más lo que nosotros llamamos sugerencias. Y en ese planeta, cada cual,
por mano de su propia sabiduría en evolución, trata de dar lo mejor de si
mismo...
EDUARD MEIER
Probablemente
de entre los contactados de este último siglo sea Eduard Meier uno de los más
celebrados y controvertidos por la propia realidad que vivió y por su
trascendencia a nivel público.
Tanto
las fotos que sacara de las naves espaciales, así como sus manifestaciones.
golpearon la racionalidad de esta sociedad atada a formas de cultura atávicas e
inmóviles. El Sr. Billy Meier (digo Billy por ser éste el apelativo con el que
se conoce) consiguió establecer un contacto asiduo con los seres que vienen de
Las Pléyades.
Hasta
la fecha son más de cien veces que ha conseguido ubicarse en sus astronaves o
hablar con dicha civilización. Sus fotos y pruebas materiales no han podido ser
negadas; al contrario, la nitidez de las copias y películas dejan pasmado a
cualquier interesado en el fenómeno ufológico de nuestro tiempo.
En la
actualidad, Billy Meier está retirado de la vida mundana, creando en su granja
de Suiza las bases de una convivencia entre personas simpatizantes de su
filosofia.
Debemos
hacer un poco de hístoria de dicho fenómeno y comprender que el contacto de
este personaje viene ya desde la infancia. A los siete años una voz interna le
citó a un encuentro en un bosque próximo a su casa. El ser que descendió de la
astronave y que le acompañó en su primer viaje por el espacio, se llamaba
Sfath. Era un hombre muy viejo pero sus facciones eran totalmente normales y
hablaba perfectamente el idioma natal de Meier.
Sfath
le habló de una misión que debería cumplir y para la cual estaba ahora siendo
preparado por medio de la telepatía directa, hecho este que duraría de forma
ininterrumpida hasta los 16 años, que fue cuando otro ser tomó el relevo del
anciano maestro e instruyó a Meier en dicha preparación filosófica y
espiritual.
El segundo personaje se llama Asket y pertenecía al Universo Dal. Este Universo, -decía Asket-, es desconocido para vosotros. Se trata de un Universo paralelo al vuestro. Pero los parámetros de espacio y tiempo son distintos. Existen, decía, universos paralelos que no son perceptibles pero existen.
Asket indujo a Billy a vivir todas las posibles experimentaciones de la vivencia diaria a fin de prepararle para el futuro contacto en sus años de madurez. Viajó en consecuencia por toda la zona de oriente y por el Himalaya. Aprendiendo las culturas y las doctrinas y formándose en el espíritu de las cosas y en la sabiduría expontánea de la naturaleza.
En esta
constante experimentación y vida viajera de nuestro personaje, no faltan las
persecuciones, los oficios varios y la cárcel.
También
en un accidente, Billy Meier pierde su brazo derecho, aunque gracias a su
tremenda naturaleza consigue con el brazo sano realizar cualquier tarea por
difícil que sea.
Hinwill, Suiza |
Ya en
su tierra natal, Suiza, y en la localidad de Hinwell, Meier es citado y
entrevistado por los seres de las Pléyades, que capitaneados por la bellísima
extraterrestre Semjase, instruyen a Billy en cosmogonía y ciencia extraterrena.
Este comandante femenino, de 1.70 m. de altura y estilo nórdico, dice venir de la Constelación de Las Pléyades, a unos 500 años luz de la Tierra y de un planeta llamado ERRA que pertenece al sistema de Taygeta. Así mismo dice que su civilización y otras tantas pertenecen a una Confederación compuesta de 127 millones de seres.
Nosotros también estamos muy lejos de la perfección y debemos evolucionar constantemente, -le explicó ella a Meier-. Cuando decidimos entrar en contacto con el humano terrestre, lo realizamos porque sentimos una obligación respecto al desarrollo y a la vida esparcida por todo el Universo. No somos misioneros ni maestros, pero actuamos para mantener el orden en todas las áreas del espacio. De vez en cuando entramos en contacto con habitantes de diferentes mundos y buscamos unas individualidades que creemos que aceptarán nuestra existencia. Entonces impartimos información a esos contactados, pero solo cuando su raza se ha desarrollado y comienza a discurrir. Luego, lentamente, nosotros y otros les preparamos para la verdad, de que no son los únicos seres pensantes del universo.
Las Pleyades |
Según
Meier, los pleyadianos vivían hasta mil años; la misma Semjase era
relativamente joven, pues contaba 330 años. Su planeta natal, Erra, era sólo
ligeramente más pequeño que la Tierra, pero estaba poblado por muchas menos
personas, menos de 500 millones. Tras descubrir el hospitalario pero aún joven
medio ambiente de Erra, los pleyadianos habían puesto en marcha el planeta para
que albergase la vida, y hoy sus paisajes se parecían mucho a los que se daban
en la Tierra. Con colinas, hierba, árboles y agua corriente. Ubicaron la
producción y las instalaciones de fabricación en regiones remotas. Lejos de la
población y utilizaban los planetas deshabitados cercanos para las labores de
minería. Los pleyadianos le contaron a Meier que si viajaba a Erra, descubriría
especies similares al caballo, a la vaca, a los conejos y a los peces.
Los robots y los androides realizaban en Erra la mayor parte de las labores de esfuerzo físico. Los androides tenían el aspecto y se conformaban de una forma tan parecida a los seres humanos, que solo podían distinguirlos por sus ropas. Todos llevaban uniforme, cuyo color indicaba la tarea a la que estaba destinado el androide. Reflejaban tanto la vida real porque su piel estaba confeccionada con protoplasma vivo. Y también su cerebro era un organismo capaz de respuestas naturales y de conversación.
En Erra no solo existían las familias, sino que, a propósito, se las mimaba y cuidaba. Aunque fuesen sexualmente maduros a partir de los trece años, los pleyadianos no se casaban hasta haber completado su educación, un proceso que comenzaba a los cuatro años y que duraba hasta que alcanzaban los setenta. Para entonces habían adquirido ya unos conocimientos específicos en quince o dieciséis disciplinas, aunque, en el caso de Semjase, llegaban hasta treinta. No existía gobierno.
Tienen allí lo que llamaríamos aquí jefes espirituales explicaba Meier a quienes acudían a verle. La forma más elevada de lo que entienden por liderazgo la llaman Horralft. Se trata de una forma de vida que no posee rostro ni cuerpo, y que tampoco es espiritual. Es una mezcla de ambas cosas. Si le pusieras la mano encima, lo atravesarías. El Horralft no imparte órdenes. Te dá algo más, lo que nosotros llamamos sugerencias. Y en ese planeta, cada cual, por medio de su propia sabiduría en evolución, trata de dar lo mejor de si mismo.
Acoplamiento Soyuz - Apolo |
Una de
las experiencias más tremendas que vivió Billy Meier, fue un viaje que realizó
en una astronave pleyadiana y que le acercó hasta una distancia de 3 metros del
acoplamiento del SOYUZ‑APOLO. Este acontecimiento terrestre fue mirado y
animado por estos seres superiores que acudieron a la cita espacial sellando el
pacto de amistad entre las Naciones y el Cielo.
‑¿Por qué no aparecéis en masa y os mostráis al público?, y ¿por qué no entrais en contacto con los gobiernos?.
‑ Las masas nos reverenciarían como a Dioses, tal como ocurrió en épocas pasadas, explicó Semjase, o se pondrían histéricas. Por eso consideramos más prudente entrar en contacto solo con personas individuales durante algún tiempo, para difundir, a través de ellas el conocimiento de nuestra existencia y nuestra llegada a este planeta.
Además los Gobiernos de la Tierra están compuestos de seres humanos para quienes el ansia de poder y la sed de lograr beneficios constituyen algo característico. Sólo desean, bajo el pretexto de la paz y de la amistad, ocupar nuestras naves luminosas y ejercer el poder absoluto sobre la Tierra. Pero no se detendrían aquí. Desearían capturar todo el Cosmos, porque no conocen límites de ninguna clase. Por otra parte, si no son capaces de lograr la paz y la amistad entre las naciones de la Tierra, ni si quiera en sus propios países, ¿cómo van retener semejante poder en sus manos, como el de nuestras naves luminosas?. No tenemos el menor interés en revelarnos al público en general. Por lo tanto, en la actualidad resulta aconsejable mantener contacto sólo con seres humanos individualmente. y a través de ellos, y lentamente, permitir que el conocimiento de nuestra existencia y de nuestra misión lleguen a conocerse, y preparar a otros para nuestra llegada.
Una advertencia más: existe una estructura evolutiva en el orden espiritual que el hombre terrestre debe desarrollar por si mismo antes de que resuelva ciertos secretos científicos. Incluso entonces, el peligro existe, en el sentido de que el hombre terrestre, al ejercitar ese conocimiento técnico, lo emplee con malos finés y por motivos y ansias de poder. Debe recordar, cuando logre las técnicas necesarias, que no podrá volar a otros planetas con la esperanza de resultar siempre vencedor.
Los otros habitantes cósmicos no se encuentran impotentes al ataque de otra raza. Podría seguirse una derrota mortífera para la Humanidad Terrestre y una completa esclavitud que le podría llevar otra vez a los tiempos más primitivos. Cuando el hombre terrestre trate de llevar su bárbara ansia de poder al cosmos, debe considerar su propia destrucción.
Esto es
cuanto se debe contar a los seres terrestres, puesto que su razón espiritual
está aún pobremente desarrollada. Esta fue la desgraciada experiencia de una
segunda raza de humanos en vuestro propio sistema solar. Su planeta se perdió
en una vasta explosión, y no quedó nada, salvo los desolados asteroides que
giran en torno a vuestro Sol.
Semjase
le explicó, brevemente, que la civilización pleyadiana se había originado
muchos miles de años atrás, no en Las Pléyades, un sistema solar muchísimo más
joven que el nuestro, sino en la Constelación de la Lira. Cuando se declaró la
guerra, antes de que el planeta fuese destruido, gran parte de la población
emigró a otros sistemas estelares, a las Pléyades, a las Híades y a un planeta
que orbitaba cerca de una estrella llamada Vega.
En otro viaje interestelar, los nuevos pleyadianos descubrieron la Tierra y su vida primitiva evolucionando en una atmósfera hospitalaria para ellos. Desde aquél momento, según Semjase, la Tierra había sido destruida dos veces por sus propios habitantes: la primera vez por una civilización desarrollada a partir de los primeros pleyadianos quienes permanecieron y se casaron con los primeros seres humanos; la segunda, cuando otra generación de pleyadianos colonizaron la Tierra y produjeron una tecnología avanzada hasta que, de nuevo, la guerra destruyó el planeta. Semjase y los pleyadianos que eligieron regresar de nuevo a la Tierra eran descendientes de una pacífica fracción liriana, que ahora se sentía responsable de guiar a la Tierra en su evolución espiritual. Para que los humanos terrestres evitasen los retrocesos que, tiempo atrás, habían experimentado sus antepasados pleyadianos.
En otro viaje interestelar, los nuevos pleyadianos descubrieron la Tierra y su vida primitiva evolucionando en una atmósfera hospitalaria para ellos. Desde aquél momento, según Semjase, la Tierra había sido destruida dos veces por sus propios habitantes: la primera vez por una civilización desarrollada a partir de los primeros pleyadianos quienes permanecieron y se casaron con los primeros seres humanos; la segunda, cuando otra generación de pleyadianos colonizaron la Tierra y produjeron una tecnología avanzada hasta que, de nuevo, la guerra destruyó el planeta. Semjase y los pleyadianos que eligieron regresar de nuevo a la Tierra eran descendientes de una pacífica fracción liriana, que ahora se sentía responsable de guiar a la Tierra en su evolución espiritual. Para que los humanos terrestres evitasen los retrocesos que, tiempo atrás, habían experimentado sus antepasados pleyadianos.
Para ayudarles en su misión, los pleyadianos habían entrado en contacto telepático con numerosos terrestres, pero los elegidos, llegado el momento, demostraron carecer de conocimientos, voluntad o lealtad. Los pocos que poseían todas estas cualidades temían exponerse, y por eso se mantenían callados a cerca de sus contactos.
- Nosotros somos los pleyadianos -explicaba Meier a la gente sentada a la mesa-, procedemos de un cruce entre pleyadianos y seres humanos de la Tierra.
Respecto
al planeta origen de Semjase, Meier dijo:
- Se parece mucho a la Tierra. Es un poco más pequeño que la Tierra. Los edificios son redondos. Los vehículos no tienen ruedas, están suspendidos y el trabajo lo realizan los robots y los androides. Los androides son a medias mecánicos y a medias orgánicos. y capaces de pensar por si mismos, pero los humanos vigilan todo cuanto hacen. Cada familia no cuenta con más de cinco personas, los padres y un máximo de tres hijos.
Meier contó que unas tres mil naves de otros sistemas estelares de la galaxia visitaban la Tierra cada año:
- Existen
ocho razas humanas diferentes que poseen estaciones aquí en la Tierra afirmó.
Exploran, estudian, están aquí para observar.
Ante la
posibilidad de que los seres del espacio nos atacaran, Meier dijo:
- Si una raza humana cruza una distancia muy grande, tal vez años luz del espacio, no va a venir aquí para plantear problemas o para comenzar una guerra. El ser humano es una criatura combativa, toda su vida se basa en la lucha, por lo que cree que si hay aquí una raza procedente de otro planeta, esas criaturas harán exactamente lo mismo que él. Pero no es cierto. Si lo deseasen los pleyadianos destruirían la Tierra en cuestión de minutos, -explicó Meier-. Y hubieran esclavizado a todos los terrestres hace ya miles de años. Meier admitió que algunas de las naves se habían llevado a humanos contra su voluntad y los antropólogos quienes, al descubrir a un pueblo primitivo que todavía existe en la Tierra, mandan equipos para estudiarlos y luego vuelven con ellos para enviarlos al laboratorio.
Si los
pleyadianos u otras entidades se llevaban a seres humanos, sólo era por
satisfacer su legítima curiosidad. De vez en cuando, se comete algún error y un
humano secuestrado muere, lo mismo que los médicos en la tierra cometen errores
que originan alguna muerte. Pero nunca han sacrificado a propósito la vida
humana.
Con los pleyadianos a unos quinientos años luz de la Tierra, los físicos terrestres opinan que, viajando a la mayor velocidad concebible, es decir a la velocidad de la luz, un viaje desde Las Pléyades a la Tierra, y regreso, requeriría mil años, sin embargo, Meier mantenía que el sistema de propulsión pleyadiano era capaz de alcanzar velocidades de muchos millones de veces más veloces que la luz. Y que, con frecuencia, Semjase iba y volvía desde su planeta natal ERRA, y la Tierra. Los pleyadianos, añadía Meier, realizaban el viaje en siete horas.
Durante
el cuarto contacto, y de nuevo en el octavo, Semjase le había explicado
aspectos del sistema de propulsión que permitían a las naves luminosas
pleyadianas trascender la distancia y el paso del tiempo:
- Para viajar a través del espacio cósmico, -dijo-, se necesita un impulso que sobrepase muchas veces la velocidad e la luz. Pero esa propulsión solo entra en acción cuando ya se ha alcanzado dicha velocidad. Esto significa que una nave luminosa necesita por lo menos dos impulsos: uno normal que proporciona impulso hasta alcanzar la velocidad de la luz, y un segundo híper‑impulso, como vosotros lo llamaríais. Con este segundo impulso paralizamos el tiempo y el espacio. Y sólo cuando el tiempo y el espacio han dejado de existir somos capaces de viajar a distancias de anos luz en una fracción de segundo. Todo se realiza de una manera tan rápida que los vivientes ni se dan cuenta.
No estoy autorizada a darte más detalles. Pero puedo decirte que vuestros círculos científicos más avanzados siguen aún trabajando sobre sistemas conocidos como impulsos emisores de luz e impulsos de taquiones. Los principios elementales ya les son conocidos. El impulso emisor de luz sirve como un sistema de propulsión normal para hacer avanzar las naves hasta los límites del espacio y del tiempo. Una vez allí, el impulso del taquión entra en acción. Se trata del sistema de híper-propulsión, que es capaz de forzar el espacio y el tiempo hasta el híper‑espacio. Nosotros empleamos otros nombres, pero los principios son exactamente los mismos.
Conclusión.‑ Todas las experiencias vividas por este gran contactado, se pueden resumir en tres apartados principales:
1°
Dentro del Campo de la Ufología propiamente dicha, Eduard Meier aporta las
mejores secuencias y fotografías sobres naves u ovnis. Y esto lo afirmo de
manera personal. Pues concretamente el pasado 22-06-1989 fui invitado junto con
otros investigadores del tema, a la EXPO‑OVNI 89 celebrada en La Coruña. Allí
dentro de la sala de exposiciones había un audio‑visual que emitía un vídeo con
las mejores secuencias filmadas por Eduard Meier. Jamás mis ojos han
contemplado unas secuencias e imágenes tan nítidas, espectaculares y tan bellas.
2° Es
contactado por seres de Las Pléyades. Son varios los contactados que hacen
referencia en sus encuentros con estos seres procedentes de las Pléyades.
Hoy que
está tan de moda la guerra de las galaxias entre las grandes superpotencias, Meier advierte por indicación de los extraterrestres, que jamás el hombre de
este planeta podrá salir al espacio exterior de una forma total, si antes no
AUTORREALIZA LOS VALORES ESPIRITUALES.
A modo de segunda parte, en relación con el contactado Eduard Billy Meier, hay una segunda entrada en este blog, donde puede ampliarse y complementarse toda la información sobre los visitantes de las Pleyades.
El titulo es:
Asket procedía del Universo DAL: “Es desconocido para tu universo, pero es paralelo al vuestro. Contándolo en vuestro tiempo se encuentra en un plano igual. Muchos de los universos se hallan en planos de tiempo y espacios desconocidos por completo para vosotros. A causa del desarrollo tecnológico, la barrera puede abrirse desde nuestro universo al vuestro”.
Link:
https://elmensajedeotrosmundos.blogspot.com/2020/03/asket-procedia-del-universo-dal-es.html
..........................................................
A modo de segunda parte, en relación con el contactado Eduard Billy Meier, hay una segunda entrada en este blog, donde puede ampliarse y complementarse toda la información sobre los visitantes de las Pleyades.
El titulo es:
Asket procedía del Universo DAL: “Es desconocido para tu universo, pero es paralelo al vuestro. Contándolo en vuestro tiempo se encuentra en un plano igual. Muchos de los universos se hallan en planos de tiempo y espacios desconocidos por completo para vosotros. A causa del desarrollo tecnológico, la barrera puede abrirse desde nuestro universo al vuestro”.
Link:
https://elmensajedeotrosmundos.blogspot.com/2020/03/asket-procedia-del-universo-dal-es.html
...............................................................
Billy Meier TODA LA HISTORIA I
Billy Meier TODA LA HISTORIA II
Billy Meier LA HISTORIA CONTINUA
Billy Meir 1 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 2 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 3 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 4 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 5 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 6 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 7 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 8 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 9 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 10 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meir 1 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 2 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 3 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 4 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 5 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 6 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 7 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 8 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 9 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Billy Meier 10 de 10 (Hacer doble clic en vídeo)
Me encanta su blog es muy interesante me gustaria ver mas publicaciones a diario un saludo desde méxico :)
ResponderEliminarEste blog me entusiasmó por su calidad y mensaje. Desde hoy me convierto en uno de sus difusores. Muchas Gracias!
ResponderEliminarGracias por esta bella informacion que en realidad desconocia, ahora entiendo la bella cancion del maestro Juan Gabriel, el tema se llama " NO APAGEN LA LUZ ", donde dice que el planeta Erra en pedasos esta debido a una guerra que se desato, me en cantaria poder profundisar mas mis conocimientos en este tema de los pleyadianos.Gracias .
ResponderEliminarEntonces, ¿Dónde queda la antropología? Mein herr Meier debería informar a los terrestres cómo se llama el ambiguo planeta del que proceden, cuánto tiempo viven sus habitantes, qué habitan ¿casas, edificios, complejos habitacionales, en el aire o dentro de algún mar u océano? ¿De cuántos sexos se compone su población? ¿Cómo se reproducen? ¿Por medio de telepatía o sexualmente? Si sexualmente ¿Qué forma tienen sus órganos reproductores? ¿Cómo paren a sus crías? ¿Cómo reptiles o como mamiferos o en alguna forma imposible de entrever por mí? ¿Comen alimentos o se nutren con pastillas? Si comen alimentos ¿Los cocinan? Si los cocinan ¿Tienen cocinas dentro de sus casas (si es que tienen una)? ¿Duermen en camas o en el piso o en el aire? ¿Se enamoran? ¿Se casan? ¿Tienen alguna religión o son ateos? ¿Usan zapatos, calcetines, pantalones, shorts, etc.? ¿Tienen sistemas de televisión o todo lo ven telepáticamente? Etc., etc., etc.
ResponderEliminarPero además, usando solo el sentido común ahora que ya han pasado más de cuarenta años de que empezaron esas "visitas", y tenemos tantos adelantos tecnológicos, es inconcebible para mí que heil herr míster Meier, después de "sus viajes al futuro", no nos haya informado sobre los teléfonos móviles, el wasap, el Facebook, el Tuiter, la comunicación instantánea cara a cara de personas separadas entre continentes por medio de las computadoras o los móviles, accesible para cualquier individuo de una forma mucho más barata que las antiguas llamadas telefónicas intercontinentales.
Hoy en día, ya tenemos muchos elementos en que apoyarnos para cuestionar sus supuestos viajes al pasado y al futuro. Si Mr. Edward "Billy The Kid" Meier no nos informó hace muchos años acerca de eso es porque TODO, TODO LO QUE HA CONTADO, ES UNA VIL Y ABSOLUTA MENTIRA.